De carnavales y tristezas
Trato y trato y no me sale nada chistoso. Supongo que Garzón hubiera preferido algo chistoso.
Que ayer en Salsa al Parque Cesar Mora cantara "quiero morirme de manera singular, quiero un adios de carnaval" con un nuevo peinado de payaso esquinero me dolió; que anoche hiciéramos por fin una ley de punto final con Narokov (recordaba que mientras en el bus, incrédula, preguntaba si era garzón, garzón, el chistosísimo de Zoociedad) me dolió; que recordara cómo la universidad ese día estuvo silenciosa, rota, pasmada, quebrada del dolor y la impotencia, me dolio.
Que en el periódico no saliera siquiera una micronota, una mencioncita, me dolió (ja...pero qué esperaba!)
A mi Garzón me duele. Me duele un resto, todavía. Aquí no es chistoso ser chistoso.
Menos cuando en el chiste demuestras lo mucho que te indigna todo lo que pasa....qué será de nosotros?
1 comentario:
Definitivamente este man si que hace falta. Fue una gran pérdida para este país.
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